Aparentemente, sin cambios

Hace un tiempo que no actualizo, si... es que realmente el cambio (al menos en mi vida) no es tan sencillo como quisiera. En nuestro país (Argentina) si bien hay cada vez una mayor concientización sobre los alimentos que consumimos, todavía hay mucha desinformación. Muchas veces, ni siquiera los propios comerciantes tienen bien en claro el origen de los productos que venden. Esta claro que, como consumidores, tenemos que empezar a exigir estos datos, pero cuando el 90% de los comerciantes te mira con cara desorbitada cuando haces una pregunta de este tipo, o te tira cualquier respuesta que cree que es correcta para que compres el producto, realmente el cambio por una vida más saludable, se empíeza a tornar una odisea impensada.


Por lo pronto, estuve haciendo una incursión en las milanesas de aduki. Hace unos meses ni siquiera sabia lo que era el aduki!! Buen comienzo no? Para el que se lo pregunta... no tengo registros de que el aduki que constituye mis milanesas sea orgánico, como dato único tengo la empresa que las prepara (Huerta Verde) y su ubicación (Provincia de Bs. As.) pero les recomiendo que las prueben, a mi me resultaron muy ricas. Realmente no tenia expectativas cuando las probé y quedé encantada!

Nuestro papel

Primero empecé juntando tapitas de gaseosa y agua para el Garrahan (ya haré un post sobre este tema) y como no sabia a donde dejarlas, cuando iba de visita a la casa de mi madre, llevaba mi bolsa de tapitas y la depositaba en un comercio cercano a su casa.
Cuando comencé a guardar la ropa de la estación anterior, aproveché para hacer un poco de orden en mi casa y me di cuenta que tengo la casa con bastantes papeles. Si bien hace un tiempo optamos por recibir toda la documentación posible a través del correo electrónico para evitar recibir más papel, veo que aún tenemos bastante que puede ser de utilidad para el programa de reciclaje del Garrahan
Me gustaría que en mi edificio se puedan sumar a esta campaña, pero por el momento, voy a aportar mi granito de arena con las cosas de mi casa y con todo el que lea este blog y se quiera sumar.
Algunos datos a tener en cuenta:
Es importante que guardes el papel y el cartón en una bolsa o recipiente separado de la basura. Una vez que tengas una buena cantidad de papel (o aquella que puedas transportar) podés acercarte a los puntos de recolección y llevar el material.
¿Que papeles sirven?Papel blanco o de color (impreso en negro o color, con o sin ganchitos), sobres de todo tipo de papel (con o sin etiqueta, con o sin ventana de celofán), formularios continuos, diarios y revistas, carpetas plásticas o biblioratos llenos de papel (vacíos no), folletos, guías telefónicas, papel copiativo y de fax, cartón (cajas desarmadas)
¿Que papeles no sirven?Servilletas, pañuelos descartables, planchas de etiquetas, papel fotográfico, de golosinas, con carbónicos, plastificado, metalizado, envoltorio papel de resmas (si es plastificado), papel con cintas (salvo que se puedan sacar fácilmente), papeles autoadhesivos


Si te interesa conocer los centros de recolección, podes descargarte el listado según el lugar en que vivas desde aquí
       

En su justa medida

Interesarse por una vida más saludable, más ecofriendly no es solo involucrarse con el "movimiento orgánico", si venís leyendo este blog, te enteraste que estoy en el camino por hacer de mi vida una vida más armónica, más saludable y eso no pasa solamente por consumir productos de mejor calidad sino también por tomar conciencia de todo aquello que nos rodea y que nuestros actos tengan impacto positivo.
En casa somos dos, y nos gusta comer, a mi me encanta cocinar y mi pareja disfruta de lo que hago, por lo que el momento de la comida realmente lo disfrutamos. El principal problema que tengo con esto es el manejo de las cantidades, como muchas veces cocino "a ojo" y otras directamente no tengo idea de qué cantidad utilizar, termino con una cantidad de comida exagerada. Antes (de comenzar con este intento de cambiar nuestra forma de vida) eramos capaces de comer todo lo que cocinaba (sobre todo él) pero de un tiempo a esta parte, realmente estoy tratando de poner mucha atención en las cantidades, trato de medir todo lo que puedo... y un poco a "prueba y error" estoy tratando de reducir no solo lo que consumimos sino también lo que cocino.
Sobre todo porque no estoy acostumbrada a "reciclar" comida entonces termina siendo un gran desperdicio.

Lo más triste de esto es que, vivimos juntos hace 5 años, por lo que ya son varias comidas las que compartimos, de solo pensarlo me imagino la cantidad exhorbitante de comida que hemos desperdiciado en todo este tiempo. Pero bueno, como dice el refrán "más vale tarde que nunca". ¿Alguien más tendrá este problema de no saber "medir" las cantidad que cocina? A veces, me siento de otro planeta...

Manteniendo el equilibrio

Soy fanática del clima cálido... caluroso... definitivamente el frío no es lo mio. Ya comenzado el otoño y cuando el clima hace notar la cercanía del invierno siempre me pasa lo mismo... me nublo con el tema de la comida. El verano te permite resolver la comida de forma simple, una ensalada, una fruta o un yogurt y listo! Me gusta muchísimo cocinar, no pasa por el tema de la fiaca a la cocina, cuando llega el frío me quedo sin ideas! A medida que van pasando los días me voy aclimatando un poco más y comienzan a surgir algunas ideas, el tema es que ahora, tengo que transformar esas ideas en "comida saludable".

Las sopas son una opción que me encanta, pero claro... hasta el año pasado consumía sopas "de sobrecito" o tiraba un caldito en el agua, un par de verduras (cuando estaba muy inspirada) y así resolvia mis sopas. Este año, voy a experimentar con las sopas caseras, voy a ver si puedo encontrar recetas faciles que me ayuden a cocinar con alimentos mas sanos y de estación!!

Por lo pronto, sigo en el intento de alejarme de la "comida industrial" e inclinarme por un consumo más sano y saludable... ahora... en la búsqueda de recetas que se puedan hacer en invierno y no nos aporten muchas calorías!

Algunas reflexiones

Estuve un poco alejada del blog, estoy en una etapa de muchos cambios y tratando de re acomodar algunas cosas. Cuando era más chica, los cambios que hacía iban desde afuera hacia adentro (que mujer ante una crisis no fue a la peluquería a cambiar rotundamente su look?) ahora siento que estoy en otra etapa, no estoy atravesando una crisis estrictamente, pero todo comenzó a gestarse con este cambio que "sentía" que me estaba pidiendo el cuerpo por lo natural...
Igual todavía falta, y me cuesta mucho! No estoy tratando de "imponerme" una moda, o un cambio de vida, simplemente que cambiar la forma de vida que seguiste durante 30 años, no suele ser algo que sucede de la noche a la mañana. Yo creía que iba a ser más fácil, creía que teniendo la teoría me iba a alcanzar para cumplir ciertos pasos y ajustar mi ritmo de vida... No Señores! así no funciona la cosa!
Una de las cosas que me cuesta es planificar la comida!! Me cuesta mucho no recaer en el delivery (al mediodía o a la noche) o evitar el impulso de estar en la calle (por un largo periodo) y no parar en un kiosco a comprar una gaseosa o alguna pavadita más...
Me doy cuenta que con las ganas no basta, también hay que tener disciplina...

Por lo pronto, decidí resolverlo comprando en una dietética esas almohaditas de salvado y tratando de cambiar esas gaseosas por jugos o agua. Si... sé que tampoco es lo ideal, pero creo que es una buena manera de hacer una transición menos brusca.
¿Como hacen ustedes? ¿ Se acuerdan de "sus inicios"? ¿Les resultó sencillo?

Un jueves santo nada lenteja

Tradicionalmente, los católicos en vísperas de semana santa, suelen anular de sus dietas el consumo de carne roja, hace unos cuantos años atrás la tradición restringia el consumo de carne durante toda la semana, luego se hizo para los días miercoles, jueves y viernes, y ahora "solo aplica" para los jueves y viernes... (incluso el año pasado llegué a escuchar que esta "veda" solo rige para el día viernes santo; pero no se si la fuente es muy confiable) Costumbres religiosas aparte, quiero que sepan, que es la primera vez que no me resulta forzoso disminuir mi consumo de carne (que ya lleva una semana), suceso que hasta hace unas semanas me parecía totalmente descabellado.

Tenía en la heladera unas lentejas que habia comprado en la dietética (previamente las había dejado una noche en remojo y luego las herví), y este mediodía de feriado era ideal para comer algo simple, rápido y sencillo. Rápidamente pique una cebolla, la rehogué en un poco de aceite de girasol y un toquecito de aceite de oliva (orgánico! que compré ayer en un super del Barrio Chino) una vez que las cebollas estuvieron transparentes largué mis lentejas, las deje un rato para que tomen temperatura... y listo!!
Ni bien sirvo las lentejas me gusta ponerle limón. Les aseguro que es una combinación riquísima, y es una comida que no lleva más de 5 minutos de preparación. (También pueden incorporar al salteado algunos vegetales)
Pruebenlá, y después me cuentan!! No se va a arrepentir, incluso hasta lo pueden comer frío tipo ensalada y llevar al trabajo.

Las lentejas tienen fibra, son bajas en grasas y ricas en minerales... una excusa más para incorporarlas en su dieta ;)

Y con la soja... ¿qué pasa?

Siguiendo con el camino de la transformación, e intentando comer de forma más saludable (y consciente) me estoy encontrando con productos que si bien sabia que existían, eran completamente indiferentes a mi dieta; por ejemplo: los porotos de soja. No tengo idea de cómo comerlos, era una completa ignorate respecto a su cocción y las posibles combinaciones... pero aquí estamos!!
Les cuento que despues de lavar un par de veces los porotos de soja, los dejé en remojo casi un día y medio (eventualmente les iba cambiando el agua) y recién terminé de hervirlos. Me dijeron que si los hiervo poco quedan duros... durísimos y si se pasa la cocción... también quedan duros! Creo que despues de un poco más de una hora, llegue a un punto donde el poroto de soja parece comestible, no sabia muy bien con que tipo de textura me iba a encontrar pero quedo algo que sin "deshacerse" parece bastante blando. Ahora espero que mis porotos se enfrien para poder guardarlos y exprimentar con ellos en alguna ensalada (la mujer de la dietetica me comento que una vez cocidos se pueden freezar e ir usando de a poco!!). En breve les contaré que uso les dí.

Ahora, el interrogante que me surje de esto es ¿Pueden los productos con soja, o los porotos de soja ser alimentos orgánicos? He leido toda la información que se me cruzó respecto al consumo de la soja, y sobre todo, respecto a las semillas de Monsanto y el monopolio que esta empresa quiere imponer. ¿Como nos aseguramos que los porotos de soja que ingerimos no provienen de esta empresa o de otras que utilizan una gran cantidad de agroquimicos en sus siembras?

Está claro que, cuanto más alejados estemos del "proceso productivo" más incertidumbres vamos a tener, también se que existen certificaciones varias que se otorgan a los productos orgánicos para darnos a los consumidores un poco más de tranquilidad; aún no estoy interiorizada acerca de los productos con soja, pero dejo aquí plasmada mi inquietud (en caso de encontrar que otras personas tengan tambien esta curiosidad) y a medida que las vaya resolviendo, prometo dejarles mi experiencia. Por lo pronto, voy a incursionar en "el mundo del poroto de soja" cosa que para la dieta que venia teniendo es todo un avance, veremos como resulta!!